COMIDA EN EL DESIERTO

La comida de "Campaña", que así la llaman al realizarse en el desierto, comienza con la búsqueda del animal apropiado.Para esta labor, Ali, necesitó 4 días hasta que dió con un pequeño cabrito que reunía las condiciones que el quería. Llegó el día señalado y casi sin darnos cuenta, con una gran rapidez, nos encontramos montados en el Land Rover, con el animal en cuestión y todos los enseres necesarios para la comida y para pasar un día "de campo". La ida se realizó en dos viajes (12 personas mayores y tres niños aparte de lo antes comentado). Después de recorrer unos 30 Km., desierto a diestra y siniestra, paisaje salpicado por algunos rebaños de camellos y algún árbol aislado, llegamos a una zona que resultó ser el cauce seco de un antiguo río, con bastante vegetación típica de la zona, arbustos espinosos y arboles.

En tanto las mujeres instalaban las esterillas y alfombras, dispusieron los enseres de cocinar y preparaban el te, Ali y Hatri se preparaban para degollar al pobre animalito. Una vez realizado el "crimen", Ali marchó a recoger leña y preparar el hogar para cocinar. Hatri fué quitando la piel y despiezando al animal para lo que contó con mi "inestimable" ayuda.
La comida fue preparada al modo "Beduino", un lecho de arena sobre el que se hace un poco de fuego hasta que quedan brasas sobre las que se pone la carne en una bandeja metálica, después se tapa con la base de un bidón cortado a unos 25 ctm., sobre este se vuelve ha hacer un poco de fuego quedando las brasas repartidas sobre el, alrededor se junta la arena alrededor del bidón de modo que quede cerrado herméticamente y en el tiempo que se tarda en hacerse y tomar el primer té (unos 45 minutos), la carne está hecha, cosa que se comprueba levantando un poquito un lateral, si efectivamente está hecha se retira y a comer. Durante la preparación de la carne, se han preparado los pinchitos. Tanto la carne como los pinchos estaban simplemente , exquisitos. Para ellos se prepararon, en una olla exprés, las visceras y otras partes del cabrito que degustaron con deleite con pan hecho por Ali, cocido en la arena y cubierto de arena y fuego (esta parte de la comida no dejaron ni que la probásemos). Después unos bailes y juegos, todo amenizado por el gran Hatri (un personaje)y a recoger y al coche.La vuelta la realizamos en un solo viaje (no me pregunteis como) todos los mencionados al principio, alfombras, los útiles del té, los utensilios de cocina..., todo de todo, cuando llegamos a Edchera ya estaba cayendo la tarde, así que un "baño" y a visionar las fotos y vídeos, un poco de juego con los niñ@s, un poco de te, un poco de cena y a dormir. Aquí dejo unas fotografías que ilustran lo narrado.